BERLINA II, poner en ~, ‘en ridículo’, del it. berlina ‘picota’, de origen probablemente germánico.

1.ª doc.: h. 1820.

El it. berlina ‘picota’ se halla desde el S. XV (Pulci), luego es muy anterior a la invención de la BERLINA I, y no puede derivar de ésta, como sugiere el REW 1043. Más bien que de un longobardo *bretling, como han supuesto varios, en desacuerdo con la fonética, parece tratarse de un a. alem. med. o longob. bretlîn (alem. brettlein), diminutivo de brett ‘tabla’, vid. P. Barbier, BDR IV, 45-46. Según Rigutini-Fanfani, vendría del nombre de un lugar de Florencia donde estaba la picota, afirmación que haría falta documentar.